CHIEFS Y RAVENS BRILLAN, STEELERS Y TEXANS DEJAN DESEOS EN NAVIDAD DE NFL EN NETFLIX.

Por Luis Martínez Alcántara

 

La Navidad de 2024 trajo consigo un evento sin precedentes para los aficionados al fútbol americano: la NFL se transmitió en exclusiva por Netflix, marcando un hito en la historia de la liga. Con dos emocionantes partidos, los Kansas City Chiefs se enfrentaron a los Pittsburgh Steelers y los Baltimore Ravens se midieron contra los Houston Texans.

 

Esta nueva asociación entre la NFL y Netflix no solo ofreció un espectáculo deportivo, sino que también prometió entretenimiento adicional con actuaciones musicales destacadas, como Mariah Carey y Beyoncé, lo que elevó aún más la experiencia navideña para los espectadores.

 

Los Chiefs, liderados por su estrella Patrick Mahomes, demostraron su dominio al vencer a los Steelers con un contundente marcador de 29-10. Mahomes tuvo una actuación estelar, completando 29 de 38 pases para 320 yardas y tres touchdowns, uno de ellos a Travis Kelce, quien estableció un nuevo récord de franquicia con 77 touchdowns por recepción. Este triunfo aseguró a Kansas City el primer lugar de la Conferencia Americana, lo que les permitirá descansar en la primera ronda de los playoffs y recibir todos sus partidos en casa durante la postemporada.

 

Por otro lado, los Ravens también dejaron una impresión positiva al derrotar a los Texans con un marcador de 27-19. Con una sólida actuación del mariscal de campo Lamar Jackson, Baltimore mostró su capacidad para competir en la cima de la liga. Este resultado fue crucial para mantener viva su esperanza de playoffs, destacando su consistencia y fortaleza en momentos críticos. Sin embargo, el desempeño de los Texans dejó mucho que desear; a pesar de algunos destellos de talento, no lograron capitalizar las oportunidades y se vieron superados por un equipo más experimentado.

 

En contraste, tanto los Steelers como los Texans no lograron cumplir con las expectativas. Pittsburgh luchó por encontrar ritmo ofensivo y no pudo detener el ataque explosivo de Kansas City. La frustración fue palpable entre los aficionados al ver cómo su equipo no podía responder ante un rival tan formidable. Del mismo modo, Houston careció de la cohesión necesaria para competir efectivamente contra Baltimore, lo que llevó a cuestionamientos sobre su estrategia y ejecución en el campo.