CRIMEN ORQUESTADO CONTRA EQUIPO DE BRUGADA

Por Monserrat Californias  

El asesinato de Ximena Guzmán y José Muñoz, colaboradores cercanos de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, fue resultado de una operación cuidadosamente orquestada.  Según la fiscal Bertha Alcalde, el ataque mostró un alto grado de planeación y profesionalismo por parte de los perpetradores. 

El crimen ocurrió en la calzada de Tlalpan, donde un agresor disparó 12 veces, matando a ambos funcionarios. Las autoridades han identificado la participación de al menos cuatro personas: el autor material y tres cómplices que facilitaron su huida. 

El agresor escapó inicialmente en una motocicleta y luego utilizó dos vehículos diferentes, todos robados, para evadir a la justicia. Las cámaras de vigilancia públicas fueron clave para rastrear los movimientos del atacante y su equipo. 

La fiscal Alcalde destacó que los responsables del crimen tenían experiencia en este tipo de operaciones, lo que sugiere un nivel de profesionalismo preocupante. A pesar de que no se encontraron huellas dactilares debido al uso de guantes por parte del agresor, se esperan resultados de pruebas de ADN que podrían proporcionar pistas adicionales. Las autoridades aún no han esclarecido los motivos del crimen ni la identidad del agresor. 

La violencia en la ciudad ha alcanzado cifras alarmantes, con un aumento del 153.3% en los homicidios durante el primer trimestre de 2025. Otros eventos violentos recientes refuerzan la percepción de inseguridad. 

La Fiscalía, junto con organismos de inteligencia y seguridad, continúa investigando el crimen.  Amistades y colegas destacan su lealtad, idealismo y entrega total al servicio público, convirtiéndose en ejemplos de vocación y sacrificio que ahora dejan un vacío profundo en la política local. 

Este ataque ha sido interpretado como un mensaje intimidante del crimen organizado hacia el nuevo gobierno capitalino. La administración de Clara Brugada enfrenta ahora el desafío de proteger a sus integrantes y mantener su estrategia, mientras crece la incertidumbre sobre los límites que el crimen organizado pretende imponer.