Por Luis Martínez Alcántara
Beyoncé ofreció un espectacular show de medio tiempo durante el partido de Navidad entre los Houston Texans y los Baltimore Ravens, celebrado en el NRG Stadium de Houston, Texas. Este evento marcó un hito al ser la primera vez que la NFL transmitió partidos en Netflix, lo que atrajo una atención sin precedentes. Con una audiencia total de más de 30 millones de espectadores para el partido, se estima que alrededor de 25 millones vieron el show de Beyoncé, destacando su impacto tanto en el mundo del fútbol americano como en la música.
La actuación comenzó con un impresionante despliegue visual y sonoro. Beyoncé apareció montada a caballo, interpretando su canción “16 Carriages”, seguida por una emotiva versión de “Blackbird”. La artista no solo mostró su talento vocal, sino que también sorprendió al público con una producción espectacular que incluyó bailarines y efectos visuales deslumbrantes. Además, la participación especial de Post Malone y su hija Blue Ivy, quien se unió a ella en el escenario, añadió un toque emocional y familiar al espectáculo.
Los fanáticos del fútbol americano quedaron cautivados por la fusión de estilos musicales que presentó Beyoncé, combinando su característico pop con elementos del country en honor a su nuevo álbum Cowboy Carter. Este enfoque innovador resonó bien con los espectadores, quienes disfrutaron no solo del fútbol, sino también de una experiencia musical única. La inclusión de temas populares y la energía vibrante del show hicieron que muchos lo consideraran uno de los mejores espectáculos de medio tiempo en la historia reciente.
La actuación fue tan impactante que se reportó que Beyoncé recibió 8 millones de dólares por su presentación de 13 minutos. Este alto costo refleja no solo su estatus como una de las artistas más influyentes del mundo, sino también la importancia que tiene el entretenimiento en eventos deportivos masivos. La combinación del talento musical y la atmósfera festiva del día de Navidad contribuyó a crear un evento memorable para todos los asistentes y televidentes.
Este espectáculo no solo consolidó a Beyoncé como una figura central en la cultura pop, sino que también marcó un nuevo capítulo para la NFL en su incursión en plataformas de streaming como Netflix. Con este debut exitoso, se espera que la colaboración entre estas dos gigantes del entretenimiento continúe creciendo, ofreciendo a los fanáticos experiencias aún más emocionantes en el futuro.