Por Abel López Jiménez
El proceso electoral federal inició ayer de manera oficial y en medio de una percepción ciudadana marcada por el temor a la inseguridad que prevalece en el país y mantiene prendidas las alertas de que éstas las elecciones federales pueden resultar las más violentas de la historia del país.
Los últimos reportes periodísticos señalan que en los primeros dos meses del año, han sido asesinados 35 candidatos a alcaldes, diputados locales y funcionarios de diversos partidos políticos. El pasado lunes, con diferencia de unas cinco horas, fueron asesinados a balazos los candidatos a alcalde de Maravatio, Michoacán, de Morena y el PAN, respectivamente.
Además de homicidios, se registran secuestros, desapariciones, balaceras, extorsiones y amenazas de muerte en al menos 14 entidades. Los datos corresponden a primeros diez días de febrero y falta por cerrar las cifras de ese mes fatídico. La inseguridad es impulsada mayormente por los grupos del narcotráfico.
El INE, en coordinación con los Organismos Públicos Locales (OPLES), son los responsables de desarrollar las actividades para la elección a la Presidencia de la República, de gubernaturas, jefaturas de Gobierno de la Ciudad de México, Congresos Locales, Ayuntamientos, juntas municipales y alcaldías en la CDMX. También serán electos 128 senadores y 500 diputados federales.
Serán más de 20 mil cargos de elección popular los que estarán en juego en este proceso electoral federal, donde destacan las elecciones estatales de Chiapas, Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán, para determinar la titularidad de las gubernaturas.
En medio de ese panorama adverso fue que iniciaron las campañas presidenciales. Primero lo hizo Xóchitl Galvez Ruiz, de la alianza “Fuerza y Corazón por México”, impulsada por los partidos de oposición PAN-PRI-PRD, a la media noche en la ciudad de Fresnillo, Zacatecas, considerada “la capital del miedo” por la ola de violencia que genera el crimen organizado en aquella entidad.
La aspirante hidalguense inició con una caminata nocturna que denominó por “un México sin miedo”, acompañada de una multitud de ciudadanos zacatecanos, en su mayoría víctimas de la delincuencia organizada.
Centró su primer discurso en su estrategia de seguridad: “La inseguridad afecta a todos por igual, pero unidos podemos vencerla y es que hay una demanda que une a todos los mexicanos: queremos vivir sin miedo y, para lograrlo, propongo como presidenta (de la República) un modelo de seguridad con cabeza, corazón y coraje”.
Además, se comprometió a construir una cárcel de alta seguridad para que los delincuentes altamente peligrosos “tengan miedo de caer ahí”, advirtió. En el trascurso del día continuó su gira proselitista por Aguascalientes y Guanajuato, donde encabezó mítines con sus simpatizantes y prometió que impulsará la pensión a partir de los 60 años de edad.
Durante la tarde de ayer hizo lo propio Claudia Sheinbaum Pardo, de la coalición “Sigamos haciendo historia”, conformada por Morena-PT-PVEM, en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México.
En el acto, la morenista dio a conocer sus 100 compromisos de campaña, donde destacó que dará continuidad a la austeridad republicana y los programas sociales: “Prometo ante ustedes no mentir, no robar y nunca traicionar al pueblo de México ni la dignidad de la República”, además de comprometerse a continuar con el legado del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En tanto, Jorge Álvarez Máynez, aspirante presidencial de Movimiento Ciudadano (MC), tuvo su primer acto de campaña en Lagos de Moreno, Jalisco. En el Jardín Central de aquella localidad, dijo a sus simpatizantes que “es tiempo de lo nuevo”, como un claro mensaje a la juventud, y pronosticó que los mexicanos tienen 90 días para hacer una elección que sirva para cambiar el futuro de México,
A tres meses del primer domingo de junio para la elección federal, el panorama se prevé complicado, donde se esperan ataques y guerra sucia de todos los frentes políticos, entre ellos la filtración de datos personales de los candidatos, con el fin de ganar terreno entre la base electoral del país, donde la sociedad tomará su decisión final en las urnas con base en las propuestas que perciba de los tres aspirantes presidenciales mencionados.