Por Luis Martínez Alcántara
CIUDAD DE MÉXICO.- El legendario beisbolista mexicano Fernando “El Toro” Valenzuela falleció a los 63 años en Los Ángeles, California.
Valenzuela, quien fue hospitalizado debido a complicaciones hepáticas, dejó un legado imborrable tanto en México como en las Grandes Ligas de Béisbol (MLB), donde fue ídolo de los Dodgers de Los Ángeles durante las décadas de 1980 y 1990.
Nacido en Sonora, Valenzuela se destacó desde joven por su imponente habilidad como lanzador, marcando el inicio de la famosa “Fernandomanía” en 1981, cuando a los 20 años lideró a los Dodgers a la conquista de la Serie Mundial. Ese mismo año, el zurdo hizo historia al ganar tanto el premio Cy Young como el de Novato del Año, un logro sin precedentes en la MLB.
Con un récord profesional de 173 victorias y 2,074 ponches, Valenzuela jugó 17 temporadas en las Grandes Ligas, consolidándose como uno de los mejores lanzadores mexicanos de todos los tiempos. Además, fue seis veces seleccionado al Juego de Estrellas y obtuvo un Guante de Oro en 1986. Su famoso “tirabuzón”, un lanzamiento característico, lo convirtió en una figura única dentro del béisbol.
Los Dodgers de Los Ángeles, equipo con el que Valenzuela alcanzó la gloria, expresaron su profundo pesar a través de redes sociales, recordando su impactante carrera y los momentos inolvidables que brindó a los fanáticos. “Fernandomanía” marcó una era y su influencia en el deporte perdura hasta hoy.
La Liga Mexicana de Béisbol (LMB) también rindió homenaje a Valenzuela, publicando emotivas palabras en las que se destacó su grandeza tanto dentro como fuera del campo. A lo largo de las últimas décadas, “El Toro” había trabajado como comentarista en español para los Dodgers, hasta que sus problemas de salud lo alejaron de las transmisiones.
El fallecimiento de Fernando Valenzuela deja un gran vacío en el deporte y la cultura mexicana, pero su legado será eterno. Hoy, México y el béisbol mundial despiden a una leyenda cuya influencia trasciende generaciones.