El Banco Mundial (BM) ha aprobado un préstamo de mil millones de dólares para México, con el objetivo de modernizar y descarbonizar su economía. Este préstamo, que forma parte del programa de Préstamos de Desarrollo de Políticas Sostenibles e Inclusivas del BM, tiene como propósito movilizar financiamiento del sector privado y fomentar una mayor participación de mujeres y pequeñas y medianas empresas en la economía mexicana.
La iniciativa también busca aprovechar las oportunidades generadas por la tendencia del ‘nearshoring’, donde empresas trasladan sus operaciones más cerca de Estados Unidos, reduciendo su dependencia de China.
El BM destacó los avances de México en términos de sofisticación económica, expansión exportadora y crecimiento de la inversión extranjera directa en las últimas décadas. Sin embargo, el banco también subrayó que el potencial de México para evolucionar hacia una economía más sostenible y productiva, así como para reducir la pobreza y las disparidades en ingresos, sigue limitado por el acceso restringido al crédito y la falta de desarrollo de los mercados privados.
La descarbonización de la economía mexicana es un componente clave de este préstamo, ya que México está experimentando una oleada de oportunidades de inversión para las cadenas globales de valor y el reposicionamiento de la demanda a una localización más cercana.
El BM enfatizó la necesidad de reforzar los estándares medioambientales, sociales y de gobernanza para alinearse con los criterios de las economías avanzadas y responder a las demandas del ‘nearshoring’. Esto implica adoptar medidas urgentes para atraer inversión y mejorar la sostenibilidad de las prácticas económicas.
El préstamo será implementado en el marco de la Estrategia de Movilización de Financiamiento Sostenible de México y la Política Nacional de Inclusión Financiera.
La aprobación de este préstamo el 3 de junio se produce poco después de la victoria electoral de la candidata presidencial oficialista, Claudia Sheinbaum.
Este respaldo financiero internacional refuerza la posición de México como principal socio comercial de Estados Unidos, superando a China. Los esfuerzos de Estados Unidos por reducir su dependencia de las cadenas de suministro chinas han creado nuevas oportunidades de inversión para México, consolidando su rol en la economía global y abriendo un camino hacia un futuro más sostenible e inclusivo.
Por Luis Martínez Alcántara